Tenerte y entender la noche eterna,
dulce sin fantasmas ni amargura,
cosido a tí sin soledades ni apariencia
desbordado de amor,sueño y locura.
Tenerte y sentir la madrugada entera
como una suma de paraiso o ternura,
despertar y soñar a cada instante,saberte cerca
y rezar porque el día no llegue nunca.
Tenerte es engañarse de que todo es posible,
que la felicidad cabe en los instantes
de paz que me regalas,saber que existe
sin piedad el amor a raudales,
sin cadenas ni posesiones,sólo libres
y solos en un alud de futuro inagotable.
ADAEV
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un alud de futuro inagotable, precioso final para un poema que se sumerge en la sonoridad de la rima para elevarse con la punta de los dedos y tocar suavemente lo amoroso.
ResponderEliminarUn abrazo
MArian
Me quedo con el mismo verso de marian...ese alud me llena de esperanza... aunque sea poética
ResponderEliminar"Tenerte es engañarse..." ¿qué nos queda si no es crernos el engaño dulce?
ResponderEliminarTe sales cuando te pones "sonetista".
Abrazosss.
realmente esperanzador, bellísimo
ResponderEliminarTenerte no es engañarse,
ResponderEliminarsino acurrucarse en las entrañas,
en un sueño profundo,
directo al cielo.
Un beso.